The sun that never will shine

Mire tus fotos, recordé tu suave pelo y el dulce sonido que producías.

Recordé que ya no ibas a volver a estar a mi lado, ese andar tan peculiar y tu mirada tan desafiante, la que me decía que hacer y en que momento hacerlo.

En mis manos se posaba tu cuerpo, en ellas pude tener el placer de sentir cosas que, en algún momento antes de ti, me fueron arrebatadas.Tu suave pelaje era mi bosque, cuando quería huir del mundo estabas tú ahí, mi oscuridad más hermosa, mi noche. 

A tu lado aparecía mi sol, aquel que siempre me otrogaba su calor y una que otra cosilla más. Aquel que poseía una mirada exactamente igual a la tuya sus miradas teñidas de vida, de ese verde único... Eran mis días, un complemento perfecto dividido en día y noche. 

Me gustaría regresar el tiempo y poder tenerlos de nuevo, haciendo que todo pareciera perfecto aunque en realidad no fuera así.

Ahora, frente a esta tempestad, me doy cuenta de su ausencia. Mi mundo se inunda, la lluvia no cesa y me doy cuenta de mi soledad.

Todos incapaces de hacer lo que ustedes. De mirarme y quererme, al mismo tiempo que me desafiaban a aspirar por un amor que recibía a medias, pero que ya había ganado.

El dulce hogar que ustedes crearon se extinguió, no tengo hogar. Ojalá pudiera retroceder el tiempo y cambiar esa tragedia.

Viviré con su ausencia, con la usencia de aquellos antes de ustedes y la ausencia de los que estuvieron antes de estos. Todos me enseñaron a amar, a olvidar momentáneamente y a perdonar. Por eso NO dejaré de amarlos y no los olvidaré. 

Y me disculparan no aprender del todo bien, pero NO perdono NI olvido a quién o quienes los quitaron de mi lado.

Tengan mejor vida, ya estoy pagando el error de descuidar la mia y la suya.

Gracias por cada hermoso momento. Algún día mi alma volverá a estar con las suyas. Eso quiero, eso espero.